CARMELITAS EXPULSADOS DE SUCUMBÍOS
Dice la palabra de Dios en Levíticos 19:18 no te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Igualmente 2° de Timoteo 3:2 indica, que habrá hombres amadores de sí mismo, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno; traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios.
Las personas que actúan de mala fe son como el arma de doble filo, qué vergüenza para quienes no tienen nada que ver en esta colada y que de verdad quieren seguir los caminos del Dios verdadero; queda al descubierto que son lobos con piel de oveja, sus dirigentes se resisten a abandonar la vaquita lechera, ¿Acaso ocultan algo? ¿De qué temen?, a lo mejor que los descubran y queden malparados delante de quienes antes eran sus seguidores.
Los grupos de poder incrustados en ISAMIS, quienes ostentaron durante décadas sin ningún control ni rendir cuentas a nadie, se valieron de una radio de la misma Misión para dividir y causar odio hacía los nuevos administradores de la Iglesia; quienes no tienen la culpa porque vinieron con nombramiento desde Roma.
No se puede juzgar a nadie en tan poco tiempo, sin conocer sus actitudes, ni su trabajo; primero debemos mirar la viga que cubre en nuestros ojos, antes de ver la paja en ojo ajeno, no hay que ser hipócritas, ciegos guiando ciegos.
Los principios de la Radio Sucumbíos fueron muy nobles, como evangelizar con transparencia y equidad, no dividir ni causar odio entre hermanos, peor aún revelarse ante sus superiores. El tiempo nos ha dado la razón, recordemos que el odio que tenemos y propiciamos contra nuestros semejantes, se revertirá sobre quienes lo han buscado.
Qué pena que todo esto haya terminado en lo que ellos mismo buscaron, la ambición de poder rompe el saco y continúan manteniendo ese estatus, afortunadamente las decisiones superiores han dado por cerrado este capítulo, pero la terquedad pretendía tener más poder que la lógica y la razón; por lo tanto ya es hora de que no se continúe haciendo el ridículo; porque se hicieron y dijeron tantas cosas absurdas y sin nombre.
Es una lástima que algunos elementos valiosos tengan que abandonar su trabajo, por la desmedida ambición de un grupillo a quienes otorgaron tanto poder, francamente es digno de repudio, que hayan involucrado también a personas dignas que merecen también nuestro aprecio y consideración, pero el daño está hecho y ahora los responsables de este descalabro, tendrán que responder a sus negras conciencias
DESPUES DE LA CONSULTA
Han pasado pocos días de la Consulta Popular y el Referéndum, planteado al país por parte del Presidente de la República y las reacciones no se han hecho esperar, tanto de los defensores de la tesis del SI; así como para quienes impulsaban el NO.
Pero quienes se precipitaron a las celebraciones en todo el país, fueron los partidarios del SI, los mismos que tuvieron que bajarse apresuradamente de las tarimas, para reunirse con sus buros de campaña y ponerse a analizar serenamente los resultados, los mismos que
hora tras hora iban cambiando peligrosamente en favor del NO.
Entonces empezó a cundir el pánico y de manera inmediata empezaron a buscar culpables, primero se la echaron a la oposición, quien dicho sea de paso y a decir de ellos, pelearon de manera desigual, frente a la abrumadora campaña realizada en los Medios de Comunicación controlados y administrados por el Gobierno, los vehículos y funcionarios públicos, reuniones de trabajo, visitas esporádicas de Ministros, Proyectos, Programas Etc. ; luego empezaron los ataques y acusaciones internas, en donde algunas personas habían sido identificadas con acierto, pero en la mayoría de casos y como siempre ocurre, caían personas inocentes; es decir la cuerda se rompe por el lado más débil, a pesar de que en estos espacios, se aprovecha para desquites o venganzas personales y sobre todo para ir poco a poco consolidando sus oscuros propósitos, que siempre los hay.
Algunos dirigentes sensatos, han asumido el triunfo del SI, con mucha humildad y sobre todo con objetividad; se ha cambiado la actitud copiada (que algunos les queda muy mal y no les cae nada bien), como la arrogancia, la prepotencia, el autoritarismo, la soberbia y la autosuficiencia; por una actitud serena, conciliadora y sobre todo práctica.
Hay que reconocer que si bien es cierto el SI ganó esta contienda electoral, este triunfo pese a ser legítimo, pierde peso porque el margen es demasiado cercano al NO y si consideramos los Votos Nulos como una expresión de la ciudadanía, para expresar su rechazo al proceso o a la consulta; saquen cuentas y veamos a dónde suben las cifras negativas; también podemos analizar desde otro punto de vista, al sumar los Votos por el NO, los Nulos y los Blancos, entonces estaríamos hablando de que la mayoría de la población no estuvo de acuerdo con la consulta y yendo mucho más allá, el rechazo al régimen resultaría evidente.
Pero yo no estoy en contra del Gobierno, porque hay que reconocer que tiene muchas cosas positivas; pero de la misma manera también tiene cosas negativas y en base a estos pequeños análisis; la conclusión es que tiene que rectificar sus actitudes.
En nuestra Provincia ha ganado el SI, aunque también con estrecho margen, lo mismo que se replicó en todo el país; pero el NO ganó en tres cantones como el de Sucumbíos Alto, Putumayo y Cascales, lo que se traduce para algunos analistas; que la ciudadanía con su voto ha expresado su rechazo, no al Gobierno, sino a sus autoridades locales, quienes siendo en los dos primeros casos, parte del partido gobiernista, no han podido tener el mismo éxito que lo lograron otros Alcaldes que no son de Alianza País.
Con toda seguridad en estos tres cantones, la oposición capitalizará estos resultados, les restará legitimidad a sus autoridades, se acogerán al Derecho a la Resistencia y exigirán rectificaciones, cambios de actitud y sobre todo que cumplan con el Plan de Trabajo que ofrecieron en Campaña; por esta razón las Autoridades de los GAD tienen un reto urgente: Cambiar de manera inmediata, su forma de administrar y para ello tendrán que incorporar cambios drásticos en su gestión y sobre todo en su actitud; porque todavía están a mitad de camino y en caso de no hacerlo, tendrán que enfrentarse a los derechos que ejercerá la ciudadanía, amparados en la Constitución.