Anciano de la tercera edad de 77 años, es estafado y echado a
la calle por entenada
NESTOR NEPTALI BASTIDAS, nos narra su triste historia:
Lago Agrio.- Yo tengo 77 años, desde hace 20
años que ya no trabajo; soy un ciudadano de la tercera edad que fui votado de
la casa como a un perro, por parte de mi entenada; del lugar donde pernotaba,
en el barrio Amazonas de esta ciudad.
Ella me estafó la platita de la jubilación, terminó con las vaquitas
que tenía, me sacó mis ropitas a la calle y me despidió, por esta razón acudí a
la Fiscalía para poner la denuncia. Mientras tanto las personas caritativas que me conocían, me han
dado posada.
Todo comenzó cuando Néstor Bastidas, aún vivía con la madre de Luz
Mireya Cusme y tres hijos más, todos eran pequeños “yo los crie, les di
educación y mantuve a todos los hijos de mi ex mujer” dice Néstor; luego de la
muerte de mi compañera, todos se hicieron grandes y se fueron de la casa,
solamente me quedé con la mencionada entenada, pero al pasar los días me gané
una vaquita que rifó los fieles de la iglesia católica y como la vaquita estaba
preñada pario un lindo ternero, luego otro y otro hasta tener varias; pero poco
a poco mi entenada Luz Mireya Cusme, terminó con todas las vacas.
“Denuncie a la Señora Luz Mireya Cusme, porque me ha estafado y luego
me botó como al perro de la calle” solo por reclamar mis derechos; “se me va de
la casa”, me dijo cuándo se enteró que la estaba denunciando en la Fiscalía,
por el abuso de confianza. Gracias a los vecinos y amigos que me conocen y me
ayudan en los trámites de la demanda. “A pesar que ella manifestó que “a esos
que están haciendo esos trámites los voy a quebrar”.
La última estafa que me hizo, fue los cuatro mil dólares del banco,
dinero que el Seguro Social me habían depositado por mi jubilación; ella
retiraba por medio de la tarjeta del banco, durante mucho tiempo me ha venido
haciendo la estafa, hasta que me di cuenta de lo que estaba haciendo y fue
cuando me pidió plata para la comida y como ya no tenía para darle se enfureció
y me saco de la casa.
Lo más cumbre es que esta señora, había hecho dos préstamos al seguro, uno de 1.500.00 y otro de
5.000.00, por lo tanto estoy en deuda con el seguro hasta el año 2.016 cuotas
que tengo que seguir pagando mensualmente, sin ni siquiera haber disfrutado de
mi jubilación. Para completar llega el
esposo de la mencionada señora, que es militar de la FAE y me dice: por
desgracia si me ha metido en problemas, yo lo traigo al abogado de la FAE y mi
mujer tiene dos abogados aquí en el centro de la ciudad y ahorita mismo se me
larga de la casa, yo soy el dueño y yo la construí, se me va ahorita.
“Por esta razón he acudido a la justicia para hacer valer mis
derechos y espero que sean justos y me den la razón, ante este atropello que
soy objeto por parte de esta señora”.