febrero 15, 2013

QUE VIVA EL CARNAVAL




 Estamos de fiestas por motivo de carnaval, la mayoría de las organizaciones y los GADs se han dedicado a preparar sendas programaciones por este motivo; sin duda alguna se trata de un evento que atrae y mueve multitudes, es decir es la mejor oportunidad para fortalecer las actividades turísticas y generar desarrollo y productividad.
Las actividades artísticas y culturales están a la orden del día, de igual manera los concursos organizados por diferentes Instituciones y organizaciones, ya seas de coplas, comparsas o las famosas camisetas mojadas; la carioca y el polvo también está presente, al igual que el agua y las anilinas y cremas de los más variados colores.
Lo único de malo es que todavía quedan algunos ciudadanos y ciudadanas, que lanzan bombas de manera indiscriminada a todo el mundo que cruzan las calles y aceras, les lanzan agua con chisguetes hechos de tubos de PVC, los mismos que tiene una fuerte presión y alcance; también han otras personas que acostumbran a lanzar huevos y todo lo que tiene a la mano, como pintura de todo tipo, que dañan la ropa y la piel, porque para sacarse toca utilizar tiñher o gasolina.
Estas actitudes groseras y atrevidas, deben ser castigadas por las autoridades, porque aparte que producen graves daños a la salud, atentan contra la economía de los transeúntes, el medio ambiente y la vida misma de las personas; porque muchas veces han ocurrido fatales accidentes, porque los agraviados intentan huir de manera despavorida y sin precaución y son arrollados por vehículos, si son peatones o atropellan a personas sin son conductores ya sea de carros o motos.
Desde luego que el intento por culturizar el carnaval, de parte de las autoridades es muy loable, pero se debe trabajar más en campañas de concientización, para lograr el compromiso de la comunidad; de esto ya tenemos ejemplos dignos de imitarse, como es el caso del carnaval de Ambato, el mismo que lo han convertido en una fiesta de flores y frutas, también es cierto que para lograrlo, han tenido que pasar por un largo proceso, opero nunca es tarde para intentarlo.
En Sucumbíos estamos empezando y estoy completamente seguro, que a muy corto plazo, vamos a lograr niveles aceptables y esta fiesta se convertirá poco a poco en un verdadero emporio de desarrollo e impulso al turismo, el mismo que generará ingreso de importantes divisas a nuestra provincia; eso será posible solamente con autoridades visionarias, que no traten de sepultar las iniciativas positivas, que a pesar de que sean de administraciones anteriores, se debe rescatar lo positivo; como ocurrió con el Municipio de Lago Agrio, que habiéndose Institucionalizado el carnaval a través de una Ordenanza vigente, se la desestimó y se emprendió con otros programas que no contribuyen en nada y más bien se realizan exagerados gastos económicos.
¡Que viva el carnaval!, que lo disfruten sin excesos y que se entienda el verdadero mensaje de estas festividades, que no sea solamente por llamar la atención, sino un intento de cambio y transformación interna de las personas, sus actitudes y costumbres.