Colombiano recorre Sud América en silla de ruedas
Lago Agrio.- Luis Ferney Castro Arias, oriundo del municipio de Cajamarca,
Departamento del Tolima-Colombia, realiza un curioso recorrido en silla de
ruedas, por las carreteras de Sud América y en esta vez lo hace en la Provincia
de Sucumbíos-Ecuador; sorteando muchas dificultades como son las cuestas muy
pronunciadas, el sol, la lluvia el hambre y las necesidades biológicas. Señaló
que la enfermedad que lo tiene postrado en silla de ruedas, es causa de un
accidente automotor ocurrido en un bus de expreso Bolivariano en Colombia, cuando
regresaba a su casa para reunirse con su familia; “a este bus se le fueron los frenos, se fue al abismo y
sufrí una fractura, a la altura de la
columna vertebral, desde ahí vivo así”.
Luego al pasar el tiempo me di cuenta que tenía que salir adelante y
que tenía una familia que mantener (esposa,
dos hijos y aparte mi mama y mis hermanos). En el año 2009-2010 logré realizar
una gira por 5 países de Suramérica entre ellos está Ecuador, Perú, Bolivia,
Brasil, Venezuela. Esto lo hago con el fin de conseguir recursos para mis
necesidades que tengo allá en mi pueblo.
Gracias a Dios, a mi familia y a las personas que me apoyan, he
logrado instalar un pequeño negocio que tengo allá, para que mi familia se
entretenga y la sociedad no me miren como una persona inservible; soy una
persona que pienso que debemos hacer un esfuerzo, valernos por sí solos y no
ser un estorbo para la sociedad.
Hasta hora llevo 38 días de recorrido, pero la meta que me propuse es
recorrer la provincia de Sucumbíos, hasta Puerto el Carmen Putumayo; luego regreso
a Dureno y cojo la vía de Puerto Nuevo, para posteriormente dirigirme hasta el
Putumayo-Colombia y paso al Departamento del Caquetá y luego a los Llanos Orientales.
Normalmente he realizado
varias veces este tipo de recorridos, soy una persona de bajos recursos
económicos y mis limitaciones físicas no
me permiten tener un trabajo donde me pueda defender económicamente; entonces
por eso es que hago estas giras con el afán de lograr que personas de buena
voluntad me colaboren económicamente con algo.
Agradezco a las personas, comunidades, recintos y a la gente de los
poblados del Ecuador que me reciben con aprecio y cariño, como persona migrante
ambulante; todos ellos me han colaborado con la posada, la comida y el aseo personal.
La Policía de Migración se alegra, me felicitan y me brindan apoyo;
para mí eso es lo más exitoso dentro del Ecuador, aquí la Policía es bastante sociable y estoy muy
agradecido por aquello.